Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, durante el control de pasajeros, mientras identificaban a una persona, pudieron observar cómo éste mostraba gran estado de nerviosismo, así como detectaron otros indicios que hicieron sospechar a la Guardia Civil que pudiera ocultar alguna sustancia ilegal, por lo que decidieron trasladarlo a las dependencias habilitadas para registros corporales.
Ante la sospecha de que pudiera llevar oculta droga en el interior de su cuerpo, se le invitó de manera voluntaria al Servicio de Radiología, para efectuarle las correspondientes placas radiológicas.
El pasajero entró en estado de nerviosismo y se negó de manera reiterativa a acompañar a los agentes al Servicio de Radiología. En el transcurso de esta conversación, salió huyendo a la carrera en el salón de reconocimiento de pasajeros.
Posteriormente, fue detenido por desobediencia a los agentes de la autoridad y acompañado el Servicio de Radiología para realizarle dichas placas radiológicas, dando como resultado positivo y arrojando un peso total de 2.124 kilogramos de resina de hachís.
