El Instituto Hidrológico de Cantabria dictaminó el pasado 5 de febrero que, sin diques, El Rinconcillo y el paraje protegido Marismas del Palmones no tienen ningún futuro. Desde entonces se vienen acometiendo unos importantes trabajos de trasvase de arena desde La Concha y bajo el puente del Acceso Norte para reequilibrar la playa. Pero sin los diques esto durará un tiempo y luego volveremos a la situación de degradación, erosión y pérdida de orilla por el alargamiento que se hizo del rompeolas que resguarda al muelle Juan Carlos I.
Recuerda que el compromiso del alcalde y del presidente de la Autoridad Portuaria con esta ciudad para salvar la playa y las Marismas del Palmones fue que los diques estén construidos, como muy tarde, en 2023. Desde el 5 de febrero hasta ahora se ha seguido hablando de los diques, pero no hay ni una sola noticia oficial de que se haya dado paso administrativo alguno en todo el procedimiento que se necesita hasta que puedan construirse. No sabemos nada.
Salvemos Rinconcillo lanza una llamada de atención: los trabajos de movimiento de arenas que se están haciendo son muy positivos pero, sin diques, esto es pan para hoy y hambre para mañana. No nos creamos que todo está hecho porque para nada es así.
