Es por ello que es fundamental que la Junta de Andalucía se ponga manos a la obra y prepare un plan de instalación de la energía fotovoltaica por todo el territorio.
Aguilera ha aclarado que la energía fotovoltaica es necesaria para un modelo de transición ecológica pero no puede encubrir lo que llamamos capitalismo verde. Así, hay sectores productivos en Andalucía y en el Campo de Gibraltar que tienen que seguir existiendo, como el sector de la agricultura, la ganadería o el turismo rural, que tienen que tener garantizada su subsistencia y que además generan apego al territorio. En este punto, ha insistido en la necesidad del mantenimiento de estas actividades, porque en una Andalucía vaciada y en una comarca que también padece la inmigración, es necesario que haya una serie de sectores productivos que arraiguen a los pueblos a la juventud.
Así las cosas, es imprescindible que la Junta de Andalucía, más allá de grandes discursos, se ponga manos a la obra y haga ese plan de ordenación racionalizar la instalación de este tipo de infraestructuras.
La diputada andaluza también ha querido referirse a la que la factura de la luz, que está absolutamente desbocada, ha manifestado. Nos parece inmoral que el Gobierno no haya hecho absolutamente nada para dar cumplimiento a uno de sus principales acuerdos, que era establecer la tarificación de la luz basada en tramos de consumo y nunca en tramos horarios. Es una ofensa a las clases trabajadoras de Andalucía y de nuestra comarca que se pongan lavadoras y lavavajillas por la noche. La noche es para descansar. Por ello, es necesario a todas luces que intervenga. Aguilera ha dejado claro en este punto que los sectores energéticos tienen que estar nacionalizados, no pueden estar en manos de especuladores y de gente que está obteniendo pingües beneficios a costa de muchas personas que padecen pobreza energética y que no puedan poner la calefacción en invierno o un ventilador en verano. Un gobierno progresista no puede permitir la especulación con un bien básico, como es la electricidad.
Por tanto, es necesario que el Gobierno intervenga para que se acabe con la especulación, porque estamos hablando de empresas que obtienen miles de millones de beneficios en un momento tan crítico desde el punto de vista económico, como ha sido la pandemia. Además ha vinculado el proceso de transición ecológica, a que la producción de energía sea renovable, medioambientalmente sostenible. Es fundamental.
Indicadores Urbanos en la comarca y el CIE de Algeciras
En otro orden de cosas, Ángela Aguilera se ha detenido en el informe del INE sobre Indicadores Urbanos del proyecto europeo Urban Audit y que ha puesto la voz de alarma en la comarca del Campo de Gibraltar. Es absolutamente increíble que después de 40 años de democracia, La Línea sea en estos momentos el municipio que menos esperanza de vida tiene, Algeciras, el séptimo y que sigamos padeciendo unos índices de desempleo brutales y unos índices de pobreza, inadmisibles. Es por ello que Aguilera ha reclamado un cambio total de la política. Andalucía necesita una voz en las instituciones, de respeto y obediencia andaluza, que represente nuestros intereses y un cambio de modelo producto para una comarca y una tierra que no pueden continuar así. Y se demuestra con datos, los que hemos dado u otros como que Linares sea la población con más desempleo o que seamos los grandes adalides de las rentas bajas o de falta de oportunidades. Basta ya de que no haya una alternativa económica e industrial para nuestra comarca, que sí puede generar riqueza desde otros sectores productivos que no sean exclusivamente industria pesada ni hostelería.
Finalmente, en cuanto al Centro de Internamiento de Inmigrantes, Aguilera ha calificado de pésima noticia que el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Algeciras esté dando los primeros pasos para la construcción de este centro. Nos parece desolador que no lleguen inversiones a nuestra comarca para sacar de las garras del desempleo a nuestra juventud y se acuerden de nosotros para instalar una cárcel de personas que no han cometido ningún delito porque ningún ser humano es ilegal. No es de recibo que las grandes actuaciones políticas que se estén dando en Algeciras y en la comarca, sea instalar un CIE, que nos resulta inadmisible desde el derecho internacional y, sobre todo, desde el papel de gendarme se le ha dado al Estado español en esa política absolutamente suicida de la UE respecto a sus fronteras exteriores. Ha aclarado que no queremos tratos con dictaduras pero tampoco queremos que se trate de esa forma tan inhumana a personas que vienen buscando una vida mejor, máxime cuando se hace desde un Gobierno progresista y un Ayuntamiento que debería estar en otros menesteres para sus ciudadanos y ciudadanas.