Si el equipo de gobierno entero se tiene que venir a acampar para impedir que se instale esa aberración en nuestro término municipal, estamos dispuestos a hacerlo, enfatizó el alcalde, Juan Franco, que hoy ha acudido a la zona acompañado por el gobierno municipal, excusando la ausencia de los portavoces de los grupos de la oposición, Juan Chacón y Juan Pablo Arriaga, por motivos laborales, aunque con su apoyo a todas las iniciativas municipales sobre este tema.
El alcalde anunció que se presentarán alegaciones al Plan Estratégico de Desarrollo Infraestructuras Eléctricas de la compañía, cuyo plazo está abierto hasta el 21 de abril, y un recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional contra la resolución de la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia por la que se declaraba de interés estratégico la obra, en plazo hasta el 25 de abril. En este sentido, hoy mismo se ha adjudicado un contrato de asesoramiento jurídico para elaborar un dictamen que servirá de base para que los abogados del Ayuntamiento elaboren los escritos que se registrarán ante las sedes administrativas y judiciales correspondientes. A ello se sumará un dictamen ambiental que contextualice la situación desde este ámbito, dado que se podrían contemplar alternativas en zonas ya industrializadas de la comarca, como Crinavis y la antigua central térmica, detalles que el alcalde tiene intención de abordar con sus homónimos de San Roque y Los Barrios. Adicionalmente, dará soporte a un documento político que recogerá las especiales circunstancias de La Línea, entre ellas, el paro, el narcotráfico, el contrabando de tabaco, el Brexit y cómo el armatoste de REE cercenaría cualquier posibilidad de desarrollo futuro para la ciudad.
Por otra parte, la presidenta de REE, Beatriz Corredor, ha contestado afirmativamente a la petición de entrevista realizada desde el consistorio y visitará la ciudad próximamente para conocer de cerca los motivos de oposición al proyecto.
La concejal de Medioambiente, Raquel Ñeco (miembro de la Comisión Municipal de Los Portichuelos junto a Manuel Abellán y Javier Vidal) resaltó el valor ecológico de la zona y las consecuencias negativas de la instalación. Entendemos las necesidades de Ceuta, pero vamos a pelear con uñas y dientes para que esa subestación no esté en el municipio, declaró. En consecuencia, se busca el apoyo de la ciudadanía para poner en marcha acciones sociales coordinadas con colectivos ecologistas, vecinales, deportivos, etc. La concejal informó que se han encargado mil banderas con el lema La línea sí, subestación, no para repartirlas entre el tejido asociativo, hostelero y comercial, así como pancartas que se colocarán en las entradas y lugares estratégicos de la localidad, dejando constancia del rechazo hacia la subestación y el cable submarino. Ñeco hizo un llamamiento a los vecinos para que se sumen y por una vez este pueblo grite fuerte y alto que, si no nos dan lo que pedimos, tampoco queremos lo que no hemos pedido.
Finalmente, Juan Franco, manifestó que tiene sensaciones, no certezas sobre si hechos como que Ceuta deje de ser una isla energética, que la inversión sea superior a 180 millones de euros con un cable de doble circuito, entre otros datos, pudiera ser porque España quiera comprar energía sucia de Marruecos, que es más barata porque no cumple con derechos de emisión. No tengo elementos de juicio, pero la sensación es esa, finalizó.