Así lo explica Manuel Matoses, arquitecto de la APBA, que destaca los materiales de la construcción,de ladrillo del mismo color de la arena de la zona. Se trata de una pieza octogonal que presenta un diseño vanguardista que simula la torsión ejercida por los vientos de poniente y levante.
Se ha mantenido el emplazamiento y la forma octogonal de la construcción primitiva, en la que había instaurada una vivienda.
El director de la APBA, José Luis Hormaechea, destaca que la obra ha dado respuesta a “las tres premisas que nos marcamos desde el inicio: La singularidad, la integración en un entorno privilegiado en el Parque Natural del Estrecho y que cumpla la función del faro”.
