El PP vuelve a imponer la Ley del silencio. Landaluce dispara las sospechas y muchas preguntas cuando sostiene en su gobierno a una edil que, además de sus graves errores políticos, está inmersa en un lamentable proceso judicial que ya entra en su fase definitiva, afirma el viceportavoz municipal socialista, Fernando Silva.
Los socialistas observan con preocupación la actuación de quien debería evitar la mala imagen y promover el buen ejemplo político de la institución municipal que encabeza. También el PP tiene estatutos que abordan estas situaciones, y no se conoce ni siquiera la apertura de un expediente informativo sobre la actuación de la señora Ruiz.
Lo que vemos son comportamientos y silencios lamentables, como si el PP de Algeciras aplicara la omertá, el código de honor siciliano que prohíbe informar sobre las actividades delictivas consideradas asuntos que incumben a las personas implicadas, cuando debería mostrar firmeza y transparencia éticas y democráticas, señala el viceportavoz municipal del PSOE.
El grupo municipal socialista observa también en este caso el reciente fichaje con cargo a la cuota de eventuales del PP en el Ayuntamiento de quien fuera candidato a la alcaldía por el partido local Libres, que puso mucho interés en campaña electoral en restarle votos al PSOE.
No es nuevo lo que vemos. El PP del régimen de Landaluce atrae a su interés, pagando con fondos municipales, a quienes considera que le han prestado un servicio o que se lo pueden prestar todavía. Ha ocurrido en muchos mandatos, sobre todo conforme se ha ido debilitando la mayoría absoluta de la que ha venido disfrutando Landaluce, concluye Fernando Silva.
Los socialistas no esperan explicaciones, sino que demandan decisiones que no se toman, especialmente en lo que se refiere a la transparencia política y buen ejercicio de la democracia en el seno de la Corporación Municipal de Algeciras.