El 28 de agosto, en la piscina de la urbanización privada que según normativa vigente no necesita socorrista, una menor de 3 años, en un despiste de su abuela, se lanzó a la piscina sin ningún sistema de flotación infantil, por lo que se hundió a una profundidad de 1,30 metros. Paloma, que se encontraba con su madre a un metro de distancia, al observar lo sucedido, no se lo pensó y acudió a su rescate, sacándola a la superficie evitando que se ahogara.
Durante este encuentro, el primer edil ha felicitado a la pequeña por su gran valor y le ha entregado la insignia de la ciudad en agradecimiento Paloma, a su corta edad, es sin duda un referente de esfuerzo, trabajo y constancia, que demuestra día a día en el colegio y en sus entrenamientos de natación. Esta niña ha llevado a cabo un acto de ayuda desinteresada, que debe servir de ejemplo para toda la sociedad algecireña, especialmente en estos tiempos tan difíciles, en los que la colaboración y la solidaridad son pilares fundamentales para salir de esta crisis en la que la Covid-19 nos ha hundido.