CCOO explica que durante este difícil periodo los trabajadores han demostrado como tantos y tantos profesionales del sector sanitario su capacidad de entrega y profesionalidad, han puesto por delante la protección de la salud de todos y han permanecido en primera línea en la lucha contra el COVID durante todo este duro periodo, han hecho todo y más de lo que cabe esperar de un trabajador, han permanecido disponibles para cualquier necesidad las 24 horas del día y los 7 días de la semana, han cubierto todas las necesidades del hospital sin tener en cuenta horarios, descansos, si lo que se necesitaba correspondía o no a su categoría profesional y lo más importante, cuando a toda la población se les pedía que se cuidasen, ellos han tenido que soportar la preocupación constante al exponer su salud y la salud de su seres queridos, un ejemplo para toda la sociedad que superó las expectativas por su vocación y profesionalidad.
“Esperábamos por parte de la dirección del centro una postura similar y que se tuviese en cuenta esta actitud tan loable de la plantilla haciendo que los trabajadores se sintieran valorados y arropados, sin embargo en lugar de esto, la dirección del centro ha optado por mantener la misma actitud conflictiva de siempre, esa actitud que llegó incluso a ser condenada recientemente en los tribunales, en la sentencia, el juez interpretó como persecución sindical las represalias tomadas contra una delegada de prevención que denunciaba falta de medidas de seguridad para los trabajadores y usuarios en la exposición a radiaciones en quirófano”, dice.
El pasado viernes, el comité junto a los asesores de CCOO, volvió a reunirse con la dirección del centro esperando un cambio de actitud y un mejor ambiente para las negociaciones de las reivindicaciones que están sobre la mesa desde hace más de un año, en lugar de esto nos encontramos con la habitual respuesta negativa y la misma incapacidad para llegar a acuerdos, nos sorprendió sobremanera que en lugar de un mensaje de gratitud, la dirección del centro plantea que los trabajadores del hospital tendrían que estar agradecidos por no haber planteado un ERTE y que se han generado una serie de jornadas adeudadas por los trabajadores y que la empresa va a reclamar hasta el último minuto.
La empresa, que ha tenido en sus manos la disponibilidad total y absoluta de toda la plantilla para atender a la población en la crisis del COVID, pretende que todo el tiempo en el que toda la plantilla ha estado localizada y disponible para la cobertura de cualquier incidencia, no cuente para nada y que a partir de ahora siguen a disposición de la dirección de la empresa para cubrir vacaciones, bajas, permisos y todas las necesidades de la empresa a base de doblar turnos, eliminar descansos entre jornadas y lo que haga falta.
El sindicato lamenta que la dirección del hospital plantea que esto es innegociable considerándolo una deuda de los trabajadores, se jactan de no haber aplicado un ERTE, pero en lugar de que esto suponga un beneficio para todos, se convierte en una trampa para los trabajadores, que tendrán que tras su esfuerzo en la pandemia que pasarse unos cuantos meses trabajando horas extra gratis.
Al mismo tiempo la empresa Quironsalud ha solicitado al Gobierno, a través de la Alianza para la Sanidad Privada Española (ASPE), medidas de apoyo para su viabilidad económica, las cuales van desde el no pago de tributos a líneas de financiación y subvenciones. Con este objetivo conseguido, terminarían de rizar el rizo, disponiendo de la bolsa de horas de disponibilidad que no computarán seguramente como disminución de gastos previstos en la cuenta que presenten a la administración, si además obtienen alguna prestación económica, la cuenta de resultados de este año será muy distinta de las que se espera en el resto de empresas y hogares en España.
“El viernes pasado ya expusimos ante la dirección del centro los abusos e incumplimientos de convenio detectados entre los que está la modificación de los turnos de trabajo aumentando el máximo de jornada permitida, continúan asignando al personal funciones que no les corresponden, aun a día de hoy no hay celadores en el centro y sus funciones las realizan el resto del personal sanitario y de administración, exceptuando los cargos. Los enfermeros de urgencias hacen funciones de técnico de rayos con lo que además de dejar descubierta las urgencias cuando se tienen que dedicar a hacer estas funciones, suponen un importante ahorro de personal para el hospital, sin que de ninguna manera se compense al personal de urgencias este sobreesfuerzo·, afirma.
La dirección del hospital a pesar de las continuas reivindicaciones del comité de empresa, continua con la política de escasa dotación de personal para aumentar el beneficio, se comenten frecuentes errores en la elaboración de las nóminas y casualmente siempre en beneficio de la empresa, esto como ya denunciamos hace meses está provocando que el personal en cuanto tiene oportunidad, causa baja en la empresa huyendo de esta situación y la consecuencia es una continua salida de profesionales experimentados y reemplazo por personal inexperto que tras unos meses, pasará a engrosar la lista de los que se van. Si la dirección del centro no ve en esto un problema para la calidad en la atención a sus clientes, el problema del centro es la dirección. Desde la incorporación de la nueva dirección a la que este comité dio un plazo de 6 meses para asentarse en el centro, las múltiples reuniones posteriores en las que se han planteado una y otra vez los mismos problemas, los compromisos de la dirección una y otra vez se han incumplido, no se ha aceptado ninguna de las propuestas presentadas por el comité, por el contrario se han consentido maniobras anti sindicales como ya quedó demostrado en la reciente condena de los tribunales.
El comité de empresa y los asesores de CCOO esperan que la empresa QUIRÓNSALUD tome cartas en el asunto exigiendo de la dirección un cambio de actitud que le haga reconsiderar sus decisiones tan perjudiciales para la plantilla del centro y tome las medidas necesarias para evitar esta situación.
