La reunión se ha llevado a cabo con aquellos empresarios que se podrían ver afectados por las zonas que tras un estudio sonométrico son susceptibles de ser declaradas ZPAE (zonas de protección acústica especial), algo que aun está en estudio y que también tendrá que pasar por Pleno y ser sometido a periodo de información publica.
Desde el equipo de Gobierno se pretende, habida cuenta de que el mapa estratégico aún no se encuentra cerrado, contar con la participación de los principales afectados para que, a la vez de conocer de primera mano el estado de desarrollo del documento, se pueda comenzar a trabajar sobre posibles soluciones antes incluso que se produzca su exposición pública, prevista para la semana próxima, momento en el que cualquiera puede hacer alegaciones, llegándose incluso a modificarse el mapa de puntos de conflicto si hubiera alegaciones aceptadas al respecto.
En cualquier caso, desde la administración local se insiste en que se pretende actuar desde el consenso de todas las partes, incentivando las actividades de ocio y dinamización de la ciudad, sin obviar que en muchos casos se trata del descanso de los ciudadanos y las consecuencias negativas que en la salud conllevan los altos niveles de ruido.