Landaluce mostró su preocupación sobre este asunto durante la reunión del Working Group de las TEN-T celebrado en la sede del Ministerio de Fomento en Madrid con los coordinadores del Proyecto Autopistas del Mar (MoS), Kurt Bodewig y de los Corredores Mediterráneo y Escandinavo-Mediterráneo, Iveta Radicova y Pat Cox, respectivamente.
El presidente de la APBA calificó como un verdadero cuello de botella para Europa la línea férrea Algeciras-Bobadilla. En este sentido, subrayó que a pesar de que el tramo pertenece a dos corredores transeuropeos, padecemos el no mans land syndrome, nos hallamos en tierra de nadie, porque no se atienden las necesidades en ninguno de los dos corredores. Landaluce recordó que hace ahora 100 años, en enero de 1919, el Senado español aprobó la construcción de un ferrocarril directo desde Algeciras hasta la frontera francesa y aún estamos esperando.
En cuanto a las Autopistas del Mar, Gerardo Landaluce destacó en la estrecha relación que mantienen los puertos de Algeciras y Tánger Med, que absorben más de 300.000 camiones anuales entre una orilla y otra; el proyecto para poner en marcha una autopista ferroviaria hasta Zaragoza que canalice parte de este tráfico de camiones con el objeto de minimizar la huella de carbono; así como la necesidad de que la conexión marítima Algeciras-Tánger Med también quede incluida en el proyecto MoS de las TEN-T.