Los créditos rápidos son un servicio financiero que hay que contemplar con cuidado. De hecho, son muy criticados por las asociaciones de consumidores debido a sus altos intereses. Sin embargo, en algunos casos, son prácticamente la única opción disponible para optar a liquidez.
Afortunadamente, hay una extensa lista de créditos rápidos disponibles actualmente en España, lo que hace que el consumidor pueda comparar y beneficiarse de la competencia. A continuación, analizamos algunos aspectos que no debes pasar por alto antes de hacer una solicitud.
1 TAE
La TAE de los créditos rápidos probablemente va a ser altísima. Con todo, no es lo mismo el algo menos del 400 % TAE de Creditea que el más de 2500 % de Vivus. En igualdad de condiciones, una TAE más baja será más conveniente y desde luego es uno de los factores que nunca se debe pasar por alto comprobar.
2 Otras comisiones
Lamentablemente, los créditos rápidos suelen tener una tasa de imagos alta. Por tanto, no está de más comprobar las comisiones e intereses que cobran las entidades por demoras o impagos.
La TAE, solo refleja las comisiones obligatorias para la adquisición del préstamo y como un impago es algo sobrevenido, no se incluye en el cálculo de la TAE.
Otras comisiones que conviene comprobar son las de devolución anticipada y las de extensión de un pago, ya que su uso también es relativamente probable.
3 Requisitos
Los créditos rápidos suelen anunciarse como un servicio sin papeleo. Esto es así porque permiten su trámite 100 % online. Sin embargo, puede haber sensibles diferencias en lo que se refiere a los requisitos a cumplir.
Por ejemplo, un prestamista puede aceptar tu solicitud aunque estés en ASNEF, mientras que otro la rechace, o uno puede pedir un aval o una garantía, mientras que otro no. Generalmente, cuantos más requisitos imponga el prestamista, de menos riesgo se considera el crédito y menores serán los intereses.
Por tanto, no debes mirar a los requisitos como un gran enemigo, sino evaluar hasta qué punto te merece la pena tratar de cumplir alguno de ellos a cambio de un precio menor por el servicio.
4 Cantidades y plazos
Los créditos rápidos suelen limitar mucho las cantidades y plazos que ofrecen a sus clientes. Lo habitual es que un primer préstamo con una de estas empresas no pueda superar los 300 o 500 euros de préstamos y los 30 días de plazo. Sin embargo, también hay excepciones.
Además, merece la pena comprobar varios competidores porque en este tipo de servicio es habitual que las financieras ofrezcan el primer préstamo gratis como promoción de bienvenida.
5 Sede de la empresa y marco legal
En general, cualquier empresa de la Unión Europea nos ofrecerá una seguridad similar ya que debe cumplir con las directivas de la Unión. Sin embargo, en igualdad de condiciones, contratar con una empresa con sede en España nos permite conocer mejor las leyes a las que debe ajustarse la empresa.
También es importante por una cuestión de privacidad. Las empresas de la Unión, tienen la obligación de informarte detalladamente de cómo van a tratar tus préstamos personales, mientras que en otras zonas geográficas, la protección de la privacidad puede variar enormemente.
