Esto ha sucedido en menos de tres semanas, una vez que el Ayuntamiento decidiera contratar una actuación de urgencia, a principios de agosto, para retirar la arena que taponaba el río.
Ledesma señaló que se trata de un evento ya asiduo en la zona durante el verano que lamentablemente se está convirtiendo en algo habitual.
“Denunciamos esa dejadez por parte de la administración competente, que es la que tiene que velar para que la desembocadura siga abierta, ya que en breve tendremos las consecuencias a causa de la insalubridad de estas aguas. Esto perjudica a la fauna, a la flora, y afecta no sólo a nivel medioambiental, -apuntó-, sino también en general al uso y disfrute de sus aguas por parte de los vecinos y veraneantes”.
El responsable de la zona indicó que desde el Ayuntamiento esperan que durante los próximos días la administración actúe de verdad. “Si no, nos veremos obligados a proceder a su apertura por las causas que he mencionado, en especial para evitar la muerte de peces y que esta zona medioambiental se vea perjudicada en todos los sentidos”, matizó.
En cuanto a la última vez que actuó el Ayuntamiento, al contratar unos servicios para abrir la bocana, el teniente de alcalde aclaró que el coste para las arcas municipales, concretamente durante los últimos años, ha sido de unos 15 mil euros, dinero que los sanroqueños no tienen por qué pagar de su bolsillo, y que por tanto reclaman a las administraciones que tienen la competencia.
“Aunque para nosotros llega a ser indiferente el coste mientras siga cerrada la bocana y perjudicando al ecosistema. Por eso hemos de actuar cuando se produce esta dejadez de quien tiene la competencia real”, especificó. No obstante, el edil matizó que se trate de la cantidad que sea, ni los vecinos de San Roque ni el Ayuntamiento han de soportar un gasto que no les corresponde.
En declaraciones previas, el titular de Medio Ambiente, Juan Serván, recordaba que esta continua inacción de las administraciones está constantemente perjudicando, y de forma seria, a la fauna y flora del río, en una zona que además cuenta con un estuario y una laguna, catalogados como paraje natural protegido.
A finales de julio, la desembocadura del Guadiaro quedaba totalmente taponada, con el consecuente peligro para la fauna y flora del ecosistema. El Consistorio, entonces, solicitó a la Junta de Andalucía y a la Demarcación de Costas que se pusiesen de acuerdo para que actuase la administración que tuviera las competencias en la materia.
Ante la pasividad, finalmente el lunes 5 de agosto Ayuntamiento de San Roque actuó para evitar un desastre medioambiental. De esta manera, contrató una máquina que, primero, abrió un salida del agua del río hacia el mar, y posteriormente retiró la arena . Ésta fue acopiada en otro lugar para que pudiera ser utilizada posteriormente por la Demarcación de Costas para regenerar alguna otra playa.
Gracias a esta actuación se permitía así la oxigenación del río, que ya contaba con algunos ejemplares de peces muertos debido a semanas de inacción y desacuerdo entre las administraciones.
El río Guadiaro, el Estuario y la Laguna de Torreguadiaro pertenecen a una zona que es parte de la Red Natura 2000. Semanas atrás, el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix, recordaba que “existe un informe de la abogacía del Estado, y un informe de los técnicos de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta, que son contradictorios, y por tanto ninguna de las administraciones se hace cargo con responsabilidad”.
Recordó el primer edil que “el Ayuntamiento de San Roque lleva sufriendo los costes económicos de distintas actuaciones, que hacemos siempre en momentos de emergencia”.
