El colectivo de extrabajadores de la antigua Metalsa Algeciras han vuelto a concentrarse este martes en la Plaza Alta de la localidad algecireña para “no caer en el olvido” y exigir una solución a la situación que vienen soportando desde el año 2006, cuando cerró la fábrica.
Según ha explicado a los periodistas Cándido Solís, el portavoz de los 52 trabajadores afectados, están “pendientes del Fogasa” (el Fondo de Garantías Sociales) para percibir un dinero que permita “un respiro” a las familias. En este sentido, apunta que “nos deben una media de 80.000 euros por cada trabajador”.
Mientras tanto, siguen “a la espera” de una inversión en los terrenos de la antigua fábrica, aunque no hay “nada concreto” por el momento, ya que “todos los que han venido no ofrecían garantías”.
El portavoz de los trabajadores ha agradecido al alcalde algecireño, José Ignacio Landaluce, que se haya mostrado “dispuesto a colaborar en todo lo posible” para intentar atraer inversores “con garantías”.