IAM/Redacción Antolín Goya, coordinador de la Coordinadora de Trabajadores del Mar, principal sindicato del sector, lo anunció, en concreto, el nuevo calendario de huelga arrancaría el lunes 6 de marzo y se llevaría a cabo durante nueve días alternos, los lunes, los miércoles y los viernes de tres semanas consecutivas (los días 6, 8, 10, 13, 15, 17, 20, 22 y 24 del próximo mes), en los que los estibadores estarían llamados a parar las horas impares. Foto Estibadores hoy en Algeciras
La movilización afecta a un sector básico, el de la carga y descarga de las mercancías que entran y salen de España por barco, una carga anual valorada en unos 200.000 millones de euros, que supone el 86% de lo que el país exporta y el 65% de lo que importa.No obstante, la convocatoria de huelga no supone una nueva ruptura de las negociaciones que, de hecho, continuarán mañana miércoles. Por la mañana, a partir de las 8.30 horas, el mediador mantendrá reuniones bilaterales con sindicatos y patronal en la sede del CES.
Por la tarde, a partir de las 16.00 horas, las tres partes volverán a sentarse en la mesa de negociación en la sede del Instituto de Seguridad e Higiene en el Trabajo. Con los paros, los sindicatos pretenden exigir al Gobierno que no apruebe la reforma de la estiba en el Consejo de Ministros de este viernes, tal como tiene previsto el Ministerio de Fomento, sino que la aplace hasta que haya un acuerdo con el sector.Asimismo, los estibadores reclaman que el Gobierno vuelva a estar representado en la mesa de negociación con el sector, al considerarlo necesario para determinar cómo se traslada a la reforma cualquier eventual acuerdo que se alcance con la patronal. “Hay una necesidad imperiosa de que Empleo o Fomento se sienten en la mesa”, subrayó.
Sorpresa, ante el mediador
En este sentido, el dirigente de Coordinadora expresó la sorpresa de los sindicatos ante el hecho de que el Ministerio de Empleo, el Departamento inicialmente asignado por el Ejecutivo para mediar en la negociación, haya a su vez delegado este papel en el presidente del Consejo Económico y Social (CES).“En la reunión, el mediador ha confirmado que su papel es sólo mediar y además ha trasladado la intención del Ministerio de Fomento de aprobar la reforma este viernes”, explicó el representante de Coordinadora tras la reunión.“Ante eso, la única forma que tenemos de defendernos es presentar un nuevo preaviso de huelga”, añadió Antolín Goya, que detalló que la convocatoria se había formalizado durante el transcurso de la negociación.“Si hay compromiso de que no se apruebe el Real Decreto Ley hasta que no haya un acuerdo en el sector, retiraremos la huelga y seguiremos negociando, que es lo que queremos”, aseguró el dirigente de Coordinadora.
Los estibadores recurren a una nueva convocatoria justo en la primera reunión de la nueva ronda negociadora que se abre en el conflicto de la estiba después de que la pasada semana Fomento se aviniera a aplazar una semana la aprobación de la reforma y los sindicatos a desconvocar los paros programados inicialmente para esta semana.Asimismo, tiene lugar a tres días de que Fomento lleve al Consejo de Ministros el texto del Real Decreto Ley por el que pretende reformar el sector.A pesar de programar nuevas huelgas, los estibadores seguirán en la mesa de negociación “con la mejor de sus voluntades”, si bien mantienen su objetivo de que la reforma del sector garantice el empleo y las condiciones laborales del actual colectivo de 6.150 estibadores.
El Ministerio de Fomento no está en esta nueva fase de las reuniones, al considerar que forman parte de la negociación colectiva entre trabajadores y empresas, ámbito en el que el Departamento estima que pueden dirimirse algunas de las reivindicaciones de los estibadores que asegura no poder incluir en el texto legal de la reforma porque no lo permite Europa.La Comisión Europea debe avalar la reforma de la estiba para garantizar que se adecúa a la normativa europea, a la que actualmente contraviene. Fomento además mantiene la urgencia de abordarla para que España sortee una sanción del Tribunal de Justicia de la UE que, según el Ministerio, está a punto de fallarse.De la Serna: “La sentencia de la UE va a golpear a España como ninguna otra lo ha hecho”
Por su parte, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha afirmado este martes durante la sesión de control al Gobierno en el Senado que “urge” aprobar el Real Decreto Ley sobre la reforma de la estiba porque la sentencia “va a golpear a España como ninguna otra lo ha hecho hasta ahora”.No obstante, de la Serna ha señalado que una vez se apruebe el RD hay “tiempo más que suficiente” para el diálogo si hay voluntad y si se quiere llegar a un acuerdo.
En este contexto, el titular de Fomento ha recordado que el Gobierno cree en el diálogo y que lo ha practicado en los últimos años al incorporar las peticiones de los sindicatos en el Real Decreto hasta el límite que ha permitido la Comisión Europea, que no “admite más flexibilización”.También ha señalado que “al igual que en cualquier otro sector económico del país”, las cuestiones que se planteen, y que ya se sabe que no pueden estar dentro del RD, “pueden y tienen que debatirse en el marco de la negociación colectiva”.De la Serna está seguro de que en el ámbito bipartito se dialogará y se llegará a acuerdos para evitar generar a España y al conjunto de la economía y la sociedad española un daño “importante”.
Asimismo, el ministro de Fomento le ha trasladado al senador del grupo parlamentario Podemos-En Comú, Ferran Martínez Ruiz, que el único interés del Gobierno es “el de cumplir con la sentencia”, ya que no cumplirla supondría una multa diaria de más de 134.000 euros al día.“No hay ninguna otra intención que cumplir estrictamente con lo que dice la sentencia y con las garantías en el periodo transitorio de tres años, con el sistema de compensaciones financieras y con los sistemas de capacitación, que han conseguido que con una acreditación de 100 jornadas de trabajo sea suficiente para poder dar garantías a esos trabajadores”, ha añadido De la Serna.
Por otro lado, ha insistido en que la aprobación del Real Decreto no es el “punto final”, sino el inicio para un proceso de diálogo en el marco de la negociación colectiva “como han seguido sin excepción todos los sectores económicos de España”.Por su parte, el senador Ruiz ha acusado al ministro de Fomento de abrir un conflicto en los puertos españoles, que son “un sector imprescindible para la economía española”, y de haber tenido una actitud “irresponsable” por jugar con la estabilidad de la economía española y por “su falta de capacidad para el diálogo”.