IAM/ALJ La OCDE es una institución que aglutina a 34 economías de entre las más ricas del planeta y continuamente están haciendo gala de su objeto fundacional: mejorar el desarrollo económico y social del mundo.
Ahora su presidente, Ángel Gurria, ha advertido a los países miembros que “la austeridad ha prolongado la crisis” en países como España donde sus recortes han estado muy por encima del 10% en Sanidad y Educación.Para contrarrestar los males provocados por la cirugía sin anestesia del Gobierno de Rajoy, Ángel Gurria pide mucha más inversiones públicas. Justo lo que Podemos pide más que ningún otro partido en su programa económico: aumentar el esfuerzo estatal y esperar así crecer, o al menos, crecer por la parte pública, y no solo por el consumo privado.La OCDE parece más adaptativa que otros centros de estudios más monolíticos e ideologizados como la FAES de Aznar.
Por eso su presidente ha dicho que “Podemos no es el lobo feroz” y que el Estado debe asumir lo que la iniciativa privada o no se atreve o no puede o no quiere asumir, tal y como defiende Podemos.Parece que el contexto les importa. Por eso dicen que quizás va siendo hora de dejar de temer al lobo feroz. Se debe pensar y gestionar de otra forma y no practicando el “erre que erre” del PP, con formas econométricas y modelos que se han demostrado que no valen para impulsar la economía y generar empleo.También esta semana ha aparecido en los medios de comunicación un manifiesto firmado por unos doscientos economistas de universidades españolas e internacionales que reclaman el fin de las políticas de austeridad en España y en Europa, y donde piden el voto para la candidatura de Unidos Podemos a las elecciones generales del próximo 26 de junio.El texto -que firman expertos como Thomas Piketty de la Escuela de Economía de París; Viçenc Navarro de la Universidad Pompeu Fabra (ambos asesoraron a Podemos con su programa); o Ann Pettifor, asesora del líder laborista inglés Jeremy Corbyn- asegura que el programa de la coalición “servirá para poner punto final a las políticas de austeridad en España y, con ello, abrir un nuevo tiempo en Europa”.“La austeridad fiscal y la devaluación salarial nos han conducido a una década perdida. Hoy la eurozona aún no ha recuperado el nivel de renta per cápita previo a la crisis, y en España dicho indicador sigue siendo un 5% inferior a su nivel de 2007. En nuestro país solo se ha recuperado uno de cada tres empleos perdidos durante la crisis, la precariedad laboral se ha agravado y el 29% de la población vive en riesgo de pobreza o exclusión social” dicen los economistas.Estos consideran que nuevos recortes de gasto social y de la inversión pública, “como promete el Gobierno del Partido Popular a Bruselas, tendrían un coste económico y social muy elevado”.
Los expertos vaticinan que el crecimiento “se desaceleraría, con un fuerte impacto sobre la creación de empleo, y agravaría aún más la situación de las personas más afectadas por la crisis”.A cambio, los economistas firmantes apuestan por “exigir alto y claro a Bruselas una renegociación del ritmo de reducción del déficit público” de España. Además, para asegurar la sostenibilidad de estos objetivos en el tiempo, consideran que el próximo Gobierno debe comprometerse “a impulsar una profunda reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento que garantice su flexibilidad en función del ciclo económico”.En lo concreto, los firmantes creen que es necesario “derogar las últimas reformas laborales”, para alumbrar un nuevo marco de relaciones laborales “más democrático y equilibrado” que garantice salarios “decentes” y que “desincentive y persiga el uso fraudulento de la temporalidad en la contratación”.Al mismo tiempo, consideran que se hace imprescindible revertir los recortes aplicados durante estos años en la sanidad, la educación, la dependencia o la I+D+i y desarrollar una inversión pública “al servicio del necesario proceso de descarbonización de nuestro tejido industrial y de una transición energética basada en la eficiencia, la rehabilitación inmobiliaria y el uso de las energías renovables”.
Los economistas respaldan para estos objetivos el programa económico de Unidos Podemos. “Pensamos que su programa económico es capaz de conjugar con solvencia y rigor los desafíos del presente y los retos del futuro”, escriben. Se trata de un apoyo fundamental para el partido de Pablo Iglesias, toda vez que la formación se enfrenta habitualmente a críticas a sus medidas económicas de expansión del gasto público.Unidos Podemos ha agradecido a los economistas el apoyo y ha incidido en la necesidad del fin de las políticas de austeridad en España para que ello redunde en Europa.
“Lo que es bueno para España es bueno para Europa”. Y el mensaje es muy claro: “Poner punto y final a las políticas de austeridad en España para abrir un nuevo tiempo en Europa”. Podemos ni está solo ni es el lobo feroz. Así que no Podemos quedarnos atrás. Y el 26-J debemos sumarnos con nuestro voto al país que viene.