Partículas radiactivas procedentes de la central nuclear de Fukushima Daiichi (Japón) han llegado a España y han sido detectadas por varias estaciones de la red de alta sensibilidad del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), entre otras, en Sevilla, donde desde el 21 de marzo se han localizado tres tipos de isótopos, I-131 (yodo), Cs-137 (cesio) y Cs-134 (cesio).
La estación española que ha registrado unos niveles más altos ha sido la de Cáceres, con 2,3 miliBequerelios por metro cúbico de yodo los días 27 y 27 de marzo, pero ninguno de los dos casos tiene incidencia alguna para la población.
Fuentes del CSN han explicado a Europa Press que este nivel es “insignificante” y no afecta en nada a la salud porque son unos niveles “inocuos” para la población.
Así, han subrayado que las centrales nucleares están obligadas a avisar al CSN cuando superen concentraciones a partir de 400 miliBequerelios por metro cúbico y que el nivel de dosis límite para la población en un año es de 16.000 miliBequerelios.
Al respecto, la jefa del área de Vigilancia Radiológica Ambiental del CSN, Rosario Salas, ha mantenido que estamos “miles de veces por debajo” de los límites establecidos que son, de por sí, “muy conservadores” y fijados para proteger a la población.
Salas ha explicado asimismo que se sabe que los isótopos radioactivos detectados por esta red de medición (que tiene estaciones, además de en Sevilla y Cáceres, Barcelona, Madrid, Bilbao y La Laguna) proceden de la central de Japón porque corresponden a la que fecha para la que estaba prevista que llegara la nube de Fukushima.
“Se detectan unos picos de esos isótopos que coinciden con las emisiones de la central y, además, valores análogos se han detectado en el resto de Europa”, ha añadido.
Fuente: Europa Press