IAM/Redacción Claramente, no sólo es una falta de derechos humanos, sino también una falta de dignidad y moral humana, el permitir que ocurran tales casos como los sucedidos en Siria muy recientemente, acarreando situaciones tan innecesarias, impactantes y dolorosas como las vistas hace poco en los medios de comunicación con unas personas que sólo, huían de aquella zona en conflicto, perdida en una trágica guerra, en busca de una vida donde tan sólo querían y anhelaban una oportunidad, tanto para ellos, como para el futuro de sus hijos.
Pero más falta de dignidad humana encontramos en aquellos que se niegan a empatizar con otras personas, negándose a predicar con un ejemplo de solidaridad y humanidad ante este tema que por desgracia, nos concierne hoy a todos como personas que somos ante un problema común tan grave, que hasta miles de muertos ha acarreado; porqueperfectamente, podríamos ser nosotros los sufridores de algo semejante y análogo. No se pueden tolerar tales atrocidades humanas, tales crímenes, y mucho menos no tener una mínima reacción empática hacia los problemas que traen consigo, hacia las miles de personas que no tienen ni la más mínima culpa de lo sucedido en Siria y que forzadamente, se ven obligadas a irse, si simplemente quieren seguir con sus vidas, arriesgando extremadamente las mismas. No podemos tolerar que sigan sucediendo horrores como todas las muertes de personas y niños ahogados que se han visto ya en las playas Turcas, o en naufragios en el Mar Egeo.Nosotros no vamos a carecer de tal falta de humanismo y empatía al ver, comprender y sentir lo sucedido en Siria estos días atrás.Nosotros, las Juventudes Comunistas de Algeciras queremos pedir impetuosamente que nuestra ciudad se sume a esta causa solidaria, a esta red de ciudades refugio y de ciudades por el bien común, que cada día son más las que se ofrecen para donar su ayuda, ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza o incluso nuestra tan cercana Cádiz. Estas ciudades están predicando con el ejemplo ya citado, de humildad y esfuerzo empático, para ayudar a unas personas que por desgracia lo han perdido todo, para ayudar a unas personas que no han elegido esta triste situación. Queremos pedir que esta ciudad se sume a este cambio solidario que se está dando en muchos lugares de Europa, y que nosotros, al igual que las ciudades anteriormente dichas, prediquemos con ese hermoso ejemplo, queremos que los algecireños comprendan que las personas que huyen de aquél infierno no tienen la culpa de lo sucedido, ni otra opción a elegir, y que necesitan una ayuda urgente de nuestra parte, debido a la nula actuación de muchos gobiernos nacionales Europeos y de la ONU.Desde aquí, desde nuestras casas, desde nuestros barrios, desde nuestras calles, Queremos pedir el esfuerzo necesario que estas personas se merecen recibir por simple trato de humanidad, por comprensión, y por su lucha y gran valor hacia el bienestar de sus familias, de la estabilidad y futuro de sus hijos, y por la búsqueda de una oportunidad para empezar de cero en otro lugar, lejos, donde esa guerra de la que les ha costado tanto escapar no les pueda volver a encontrar nunca más, y que les ha llevado a recorrer miles de kilómetros hacia la búsqueda de una felicidad, como dignas personas que son.Europa no está amenazada, ni mucho menos, por la llegada en miles de personas Sirias, padres, madres y niños; son ellos los que sin quererlo lo están, por una situación que no han elegido.