IAM/Redacción Padres de alumnos del colegio Santa Teresa están indignado con la nueva dirección, “abren la puerta a las 8:55 y se agolpan 375 niños en pocos metros y dos puertas diminutas, niños de edades de entre 3 a 11 años, con mochila, carro y se forma una aglomeración diario y peligrosa en la que se incluyen coches circulando en doble fila”.
Así nos explicaba una de las madres lo que todas las mañanas han de padecer a la puerta del colegio. Los padres se han quejado a la dirección del centro “por activa y por pasiva” y no encuentran solución, ya que apuntan que el centro “no se hace cargo de los niños hasta las 9.00 h”, sin embargo pese a estar las puertas cerradas otros niños juegan en el patio al estar en horario matinal. Una solución sencilla, sería poder esperar en el patio bajo la responsabilidad de los tutores, algo que eliminaría los potenciales peligros e incomodidad para todos, creando una entrada fluida y segura.
Estos mismos padres apuntan que desde que se cambió la dirección del centro no se realiza ninguna actividad cultural, por el contrario, alaban la actitud de los profesores y las clases impartidas en dicho centro.