Parece que su única intención es recortar todavía más el gasto público en la Educación superior, reducir el número de estudiantes en las universidades públicas y favorecer el negocio de las privadas. La reforma que hemos sufrido no ha venido de la mano de una nueva ley orgánica, como en el caso del resto de los niveles educativos, sino de reformas parciales de la actual ley orgánica y de los reales decretos que la desarrollan. Comenzó con una modificación de la LOU vía Real Decreto Ley, en abril de 2012, que incorporó tres aspectos importantes: un cambio de modelo en el establecimiento de los precios (subiéndolos significativamente en muchas comunidades), una nueva regulación de la dedicación docente del profesorado y varias normas para que las comunidades autónomas limiten y controlen el gasto de las universidades. Continuó con las sucesivas modificaciones, una cada verano, del Real Decreto que regula las becas y ayudas al estudio para endurecer los requisitos que establecen su concesión y estableció una fórmula de cálculo que implica la disminución de su cuantía. Además, cada otoño, con las sucesivas leyes de presupuestos del estado y de las comunidades autónomas, hemos conocido nuevos recortes en los fondos destinados a becas y a transferencias corrientes para universidades, hasta provocar una caída en la financiación global del 23,8% de euros. El gobierno también ha cambiado el sistema de acceso de alumnos a la universidad en aplicación de la LOMCE, asimismo ha modificado la ordenación de las enseñanzas universitarias introduciendo grados de tres años y postgrados de dos. En los últimos meses de su mandato se plantea culminar su revolución ultraconservadora con la aprobación de dos Reales Decretos que transformarán los requisitos para la transformación de centros y universidades al sistema de acreditación del profesorado universitario funcionario, fundamental para el acceso a la profesión docente e investigadora.Acción Ciudadana Algeciras rechaza esta iniciativa que pretende convertir las universidades en empresas de servicio educativo. El Ministerio de educación plantea una reforma de calado sin evaluar los cambios que se comenzaron a implantar en el año 2007 en el marco del plan Bolonia.Si tenemos en cuenta los elevados gastos del postgrado y las mayores dificultades para acceso a becas y ayudas al estudio, estas transformaciones reforzarán la exclusión en el acceso a la educación superior y, a la postre, darán lugar a una disminución significativa del número de estudiantes y universitarios.Por otro lado, la reducción de número de créditos necesarios para finalizar los estudios de grado y la previsible perdida de alumnos tendrán un impacto negativo en la financiación de las universidades y el empleo, dando lugar a una reconversión del sector que no se puede aceptar. Acción Ciudadana Algeciras responderemos a estas gravísimas agresiones desde la unidad con el respeto de la comunidad universitaria algecireña, utilizando todos los elementos de presión posibles.