El actual alcalde del PP, el señor Landaluce, ha lanzado a su compañero Jacinto Muñoz a criticar a la Junta de Andalucía para intentar tapar sus mentiras electorales sobre creación de empleo. La dura realidad es que en Algeciras ha vuelto a crecer el número de desempleados.
Las cifras del mes de enero en nuestra ciudad son alarmantes. Algeciras representa más del 60% de las personas que se suman a la relación de parados en todo el Campo de Gibraltar. En términos absolutos, en Algeciras crecen los desempleados en 591 personas, mientras que en el conjunto de la comarca la cifra de parados arroja un saldo positivo de 914.
“El alcalde del PP manda a Muñoz a criticar las políticas de empleo de la Junta de Andalucía cuando él no ha cumplido nada de lo que prometió en política laboral en 2011, y ha tenido cuatro años”, afirma Francisca Pizarro, número dos de la candidatura del PSOE a las próximas Elecciones Municipales. 7
En la relación de mentiras del PP de Landaluce figuran nuevos poligonos industriales, medidas para fomentar el comercio tradicional, y planes de empleo juvenil y local, entre otras.
“La dura realidad para muchos jóvenes es que tienen que buscarse su futuro laboral lejos de Algeciras, y eso es un drama para ellos y un perjuicio para toda la ciudad, que pierde su talento”, añade Francisca Pizarro.
“Jacinto Muñoz olvida que ahora 390 personas están contratadas en Algeciras temporalmente con cargos a programas de empleo de la Junta de Andalucía. Olvida también la política de incentivos a la inversión que ha gestionado la Junta de Andalucía para que grandes empresas portuarias desarrollen sus inversiones en nuestra ciudad, y tantas medidas que aportan soluciones”, agrega la número 2 de la candidatura municipal socialista.
“Si para el PP el empleo fuera una prioridad no habría aprobado con el voto de Landaluce la reforma laboral, y habría trabajado para que las inversiones llegaran hace tres años, y tendría al Consejo Económico y Social como una referencia. Nada de esto ha ocurrido. Todo lo contrario, ha mentido y sigue mintiendo, y ya no les cree nadie”, concluye Francisca Pizarro
