IAM/Redacción Que el alcalde de Algeciras conduce la ciudad como si fuera “su cortijo” es una realidad bochornosa e inadmisible en democracia. A estas alturas y con la feria 2014 en ciernes ha hecho “oídos sordos” a las reiteradas peticiones de las cuentas de la feria 2013, (esa feria del ahorro que fue un desastre y además no supuso ahorro) , no muestra las cuentas del coste municipal del malogrado concierto de Julio Iglesias, no presenta las cuentas del dinero que gasta en publicidad en sus medios lacayos, en definitiva, en una época donde hasta instituciones como la monarquía presumen ya de transparencia, el primer edil algecireño hurta esa información a sus ciudadanos.
Los límites de opacidad municipal en Algeciras son de record y un lastre que le pesará de aquí a las próximas municipales. Y nosotros nos preguntamos y le preguntamos ¿por qué? ¿Por qué no muestra las cuentas? La respuesta obvia es porque hay algo que ocultar, pero ¿qué piensa usted? ¿considera esto algo admisible en democracia?