Según la documentación publicada, los planes surtirán efectos hasta el 31 de diciembre de 2015, sin perjuicio de posibles revisiones; en aquellas zonas donde no sea suficiente para alcanzar los niveles de calidad del aire exigidos por la legislación aplicable, se deberán aprobar planes complementarios.
En el primer semestre de cada ejercicio presupuestario se realizará una actualización de las medidas incluidas en los planes. Para un eficaz seguimiento de los mismos, se constituirá un grupo de trabajo técnico, donde estarán integradas todas las Consejerías cuyas competencias puedan afectar a la calidad del aire.
La ejecución se realizará conforme a las disponibilidades presupuestarias, sin que ello suponga incremento de gasto. La nueva planificación, enmarcada en las políticas preventivas de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, se desarrollará en Almería, El Ejido, Cuevas del Almanzora y Zona Industrial de Carboneras (Almería); Bahía de Cádiz, Zona Industrial de la Bahía de Algeciras y Jerez de la Frontera (Cádiz); Córdoba; área metropolitana de Granada; Zona Industrial de Huelva; Jaén-Torredonjimeno; Málaga-Costa del Sol; y área metropolitana de Sevilla.
En total, estas áreas están integradas por un total de 83 municipios. En ningún caso se dan situaciones de riesgo provocadas por niveles máximos ni se pretende alarmar a la población, sino adoptar medidas para profundizar en la prevención, ya que en Andalucía, en general, la calidad del aire es excelente, sin que se den situaciones de contaminación límite, aunque es necesario corregir situaciones puntuales.
En líneas generales, los planes, que tienen una dotación global de 93 millones, incluyen actuaciones preventivas destinadas a reducir el riesgo de superación de los valores límite de la calidad del aire, además de establecer los mecanismos necesarios para actuar en caso de que éstos se produzcan. Entre otras medidas, destacan las destinadas a reducir o regular el tráfico; fomentar el uso de la bicicleta; mejorar los espacios públicos a través de la creación de zonas verdes; promover el empleo de combustibles respetuosos con el medio ambiente en las flotas de vehículos municipales; respaldar inversiones en proyectos de ahorro y eficiencia energética; reducir las emisiones contaminantes de las industrias; y fijar criterios preventivos en la planificación urbanística y de obras públicas, así como realizar campañas informativas a la ciudadanía.
De acuerdo con la planificación aprobada, las medidas adicionales para combatir la contaminación de fondo serán necesarias en las zonas industriales de Carboneras y Huelva y las áreas metropolitanas de Granada y Sevilla, así como en Málaga y la Costa del Sol.
Las actuaciones denominadas ‘hot spot’ —puntos críticos de la peor ubicación observada— se aplicarán en estas áreas y también en Almería, Córdoba y Jerez de la Frontera.
Contaminantes con mayor frecuencia
El dióxido de nitrógeno, imputable sobre todo al tráfico rodado, afecta exclusivamente a las áreas metropolitanas de Granada y Sevilla, donde se han superado los límites entre 2007 y 2011.
En cuanto al dióxido de azufre, sólo la Bahía de Algeciras presenta problemas con este contaminante. No obstante, el desarrollo del Plan de Acción Medioambiental para el Campo de Gibraltar, aprobado en 2005, se ha traducido en una mejora notable de los registros. En relación con las fuentes de la contaminación, las medidas para reducir la incidencia del tráfico se extenderán a todas las áreas urbanas y también en la zona de El Ejido.
Por su parte, el apoyo a la modernización ambiental de la producción de energía eléctrica se centrará en la Bahía de Algeciras, Carboneras y Cuevas del Almanzora, mientras que los programas para el sector de la maquinaria agrícola se llevarán a cabo en El Ejido y Jaén.
Los planes se completan con actuaciones específicas para el sector de cementos, cales y yesos (Jaén), la industria de materiales no metálicos (Granada) y el tráfico marítimo (Bahía de Algeciras).
Las medidas correspondientes a Huelva y la Bahía de Algeciras se integrarán en los planes de calidad ambiental actualmente en fase de aprobación para estas dos zonas, donde se localizan las principales concentraciones industriales del sector petroquímico y de generación de energía eléctrica, y que cuentan con una amplia experiencia en la lucha contra la contaminación desde finales de la década de los 80. En Huelva también se desarrollan actuaciones para la industria química y papelera.