MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) –
El profesor Martin Eichner, de la Universidad de Tübingen, en Alemania, y Stefan Brockmann, de la Oficina de Salud Pública Regional de Reutlingen, también en Alemania, explican que la mayoría de países europeos hoy en día utilizan la vacuna antipoliomielítica inactivada (IPV) en lugar de la vacuna antipoliomielítica oral (OPV), que ha sido discontinua en la mayoría de las zonas debido a los casos poco frecuentes de parálisis flácida aguda (PFA), el síntoma principal de la poliomielitis. Así, advierten de que el brote de poliomielitis en Siria podría amenazar Europa.
La IPV es altamente eficaz en la prevención de la enfermedad de la polio, pero proporciona sólo una protección parcial contra la infección. En Europa, donde el virus de la polio ha sido eliminado durante décadas, sólo se puede prevenir la transmisión con IPV si la cobertura de vacunación es continua y muy alta y si la población tiene un alto nivel de higiene y bajos niveles de hacinamiento. Como un gran número de refugiados huyen de Siria y buscan refugio en los países vecinos y en Europa, ahora existe la posibilidad de que el virus podría volver a introducirse en las áreas que estado sido libres de la polio durante décadas.
Los autores alertan en un artículo publicado en ‘Lancet’ que en las regiones de Europa donde la cobertura de vacunación es baja (incluyendo Bosnia-Herzegovina, Ucrania y Austria), la inmunidad de grupo puede ser insuficiente para prevenir la transmisión sostenida si el virus de la polio se reintroduce en la comunidad. Debido a que sólo una de cada 200 infecciones provocan enfermedad sintomática, los científicos calculan que el virus podría estar circulando durante casi un año antes de que surgiera un solo caso de parálisis flácida aguda y se pueda detectar un brote, a pesar de que en ese momento cientos de personas podrían llevar la infección.
A su juicio, la vacunación a los sirios refugiados, como ha recomendado el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades, es “insuficiente” y se necesitan medidas “más amplias”. “La vacunación oral contra la polio ofrece una alta protección contra la adquisición y difusión de la infección, pero esta vacuna fue descontinua en Europa debido a los raros casos de parálisis flácida aguda relacionada con la vacunación”, relatan.
Estos expertos destacan que algunos de los miembros de la Unión Europea no tienen una reserva de vacunas contra la poliomielitis oral, además de que en la mayoría de los países europeos no se realizan exámenes de rutina de poliovirus en las aguas residuales.