IAM/Redacción
Los Personajes son todos y cada uno de los guardias civiles y policías nacionales que prestan servicio en la frontera con Gibraltar, y que vienen siendo vigilados e identificados públicamente en las redes sociales alentando con el consiguiente peligro para sus familias, y que además están siendo vejados e insultados no sólo verbalmente sino sufriendo y aguantando el que se le arrojen todo tipo de objetivos en una situación de indefensión que les ha obligado a denunciar públicamente la situación que padece y exigir medidas al respecto. Y así delegados del Sindicato Unificado de Policía (SUP) y de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) se concentraron el viernes en las inmediaciones de la frontera de Gibraltar para expresar su rechazo a los últimos acontecimientos acaecidos en la verja donde “la tensión se mantiene en niveles críticos”. Así, responsables de ambas organizaciones han repartido un comunicado conjunto en el que denuncian lo “inquietante” que les resulta que quienes trabajan “como profesionales de la seguridad pública para garantizar el cumplimiento de la Ley, nos convirtamos en el objetivo de un problema en el que no deberíamos tener ningún protagonismo”. En relación a los controles en la verja, aseguran ambas organizaciones que están “justificados” debido, entre otros motivos, “al incremento del contrabando de tabaco y fraude fiscal que se ha venido detectando en los últimos tiempos”. Han lamentado “la instalación de cámaras de vigilancia” por parte del Gobierno de Fabian Picardo, ministro principal de Gibraltar, y advierten de que eso “no nos va a amedrentar”. Consideran los agentes de ambos cuerpos que su fin es “garantizar la libertad de acción en la frontera conforme a las normas de la Unión Europea”. Finalmente, han pedido “contundencia” al Gobierno de España ante los “abusos” que están soportando “no ya de algunos ciudadanos de Gibraltar”, sino también por parte de las autoridades de la Roca, lo que entienden que “no se puede permitir” porque están “usando cámaras de vigilancia para intimidar a los agentes”.