IAM/EP “Sólo de las grades crisis, nacen las grandes evoluciones”, y esta es nuestra oportunidad. Recapitulemos, Rajoy en poco más de un año dotó de credibilidad a España en Europa, levantando una apaleada imagen del “Reino de España” que Zapatero se empeñó en desmenuzar y que solito (junto a su Rubalcaba) se bastó para dilapidar diez años de bonanza económica con actuaciones tan memorables como patéticas, recordar sólo la compra de su segunda legislatura con un cheque de 400 euros a todos los españoles o el infausto Plan E, que dejó en evidencia la nula capacidad que tenía el gobierno anterior para sacarnos de aquí y sí para despilfarrar el dinero de todos. Con Rajoy podremos estar más o menos de a acuerdo, la ola de privatización y recortes en sanidad y educación, sólo el tiempo dirá si era oportunista o necesaria, si fue un expolio o un salvavidas, pero estábamos avanzando en la dirección correcta, puñetera prima lo dejaba claro sin reservas. Y justo ahora, cuanto la prima se hundía en sentido contrario al de la bolsa, cuando desde Europa reconocían nuestra valía y confirmaban nuestra tendencia…..¡Bárcenas!
Ilusionado con la catástrofe que estamos viviendo, me reitero. Es nuestra oportunidad de cambiar las cosas, a estas alturas no nos quita nadie otra gripe (un millón más de parados por ejemplo) dentro de la neumonía que nos aflige desde hace ya demasiados años, pero esta gripe puede servirnos para inmunizarnos o para sufrirla sin rédito.
Las líneas rojas están para no cruzarlas y Rajoy la cruzó, ya no tiene credibilidad, tiene un lamparón en el pecho que le obliga a pedir disculpas y retirarse, nadie querrá hacerse más fotos con él, es un cadáver político y no lo dice la prensa española, sino la mundial. ¿Qué hacemos?
Coherencia señores, que la cosa está muy seria.
En primer lugar todo aquel que esté en la lista de Bárcenas, fuera, por pura necesidad de credibilidad en la clase política, por emergencia nacional si me aprietas. El mando del barco al igual que Guardiola lo hizo con su segundo Tito y ha batido records, Soraya lo puede hacer con Rajoy, nada de histrionismos, nada de elecciones, no tenemos tiempo y Soraya está limpia y a buen seguro es muy capaz de continuar la línea que marcó el del lamparón. Pero de nada sirve esto, si para las próximas elecciones no hay consensuada una clara, transparente y rigurosa ley contra la corrupción, si no se acaban con los privilegios políticos, si Las auditorías de las instituciones no tienen garantizadas su independencia, si la justicia sigue siendo controlada por políticos, si cosas tan básicas como “una persona un voto” siguen sin cumplirse en España y sirva recordar el bochorno que se resume en que el voto de un catalán sigue valiendo cuatro veces el de un andaluz, por la absurda ley electoral.
Si esta catástrofe de credibilidad nacional la utilizamos para cimentar la libertad y apuntalar las brechas de nuestro sistema, habremos convertido un catástrofe en el punto de inflexión hacia una sociedad mejor….merece la pena pasar la gripe por eso, esta es nuestra oportunidad para exigir transparencia total y convertir la partidocracia en la que vivimos, en una democracia real.
