•LA LÍNEA
12.01/013
TCAM/REDACCION
→ El restaurante El Barco, situado en el Parque Princesa Sofía de La Línea, ha sido precintado, desde la noche de ayer se puede ver como la Policía Local ha precintado el establecimiento en las distintas puertas de acceso.
El conflicto viene de largo, y ahora parece que está tocando su fin.
Cabe destacar que por Acuerdo de Pleno de 8 de noviembre de 2002, se adjudicó a Gexturocio SL la concesión de uso privativo de quioscos C y D para instalación de quiosco bar “El Barco”, en el Parque Princesa Sofía. Con fecha 18 de febrero de 2010, el Recaudador Municipal solicitó el rescate de la concesión por impago de cánones e importes relacionados con la concesión por valor de 37.536,02 euros.Posteriormente, con fecha 2 de marzo de 2011, el Sr. Recaudador Municipal emite escrito afirmando que Gexturocio SL, mantiene débitos pendientes en periodo voluntario y ejecutivo y que ha incumplido el fraccionamiento de deuda otorgado para el pago de cánones concesionales.Con fecha 28 de Julio de 2011 se emite informe del Recaudador donde consta que Gexturocio SL acumula una deuda por canon impagado, con fraccionamiento incumplido y deuda ejecutiva, por importe total de 59.735,31 euros.
Por todo lo expuesto y de acuerdo con la cláusula 13 del pliego de condiciones, se propuso por parte del equipo de gobierno en el Pleno de Septiembre de 2011:Iniciar expediente de revocación de concesión de dominio público para instalación de quiosco C y D (El Barco) en Parque Princesa Sofía, del que es titular Gexturocio SL, por incumplimiento grave del pliego por causa imputable al concesionario, ante el impago reiterado del canon anual.En aquel Pleno Izquierda Unida, felicitó al nuevo equipo de gobierno porque “en tan solo un mes, había logrado lo que el anterior equipo de gobierno no había hecho en dos años”. “También decían nuestros concejales -aseguraban desde IU – que les llamaban la atención, tanta flexibilidad, en algunos casos, y tanta rigidez en otros casos, así mientras que con los propietarios del Barco, el anterior equipo de gobierno, habían sido muy laxos en la aplicación de la legalidad, por el contrario por parte de EMUSVIL, se había querido desahuciar a personas que llevaban, dos meses de atrasos en el alquiler, cuando estas personas que habían pagado religiosamente, durante siete u ocho años, sus viviendas”, indicaron.Ahora se ha rescatado y clausurado el Restaurante, lo que es de esperar es que no sea como en el caso de la Piscina Municipal y sea realmente para bien. Porque en el caso de la piscina aún hay muchos flecos. De nada vale rescatar una instalación por parte del Ayuntamiento, so luego no tiene capacidad, recursos ni potencialidad para ponerla al día y ofrecérsela a los usuarios que pagan sus impuestos.