TCAM-ALGECIRAS/V.T.E. El comité local del Partido Comunista de Andalucía reclama que se cierre el CIE de Algeciras, ubicado en la antigua cárcel de la ciudad de la misma forma que se va a proceder con el de Málaga la próxima semana.Es destacable la similitud entre ambos centros, por las deficiencias en servicios sociales y sanitarios y la deficiente calidad de las edificaciones para albergar a estos ciudadanos en condiciones aceptables, que han sido denunciadas por todas las instancias sociales, sindicales, policiales y fiscales.“Esperamos que el próximo centro de este tipo que se cierre por el Gobierno sea el de Algeciras y que revierta al pueblo algecireño para su uso ciudadano, y pedimos al alcalde de la ciudad que cumpla con sus promesas e interceda ante el ejecutivo del PP para que así se haga a la mayor brevedad posible”, reclamó el secretario local de los comunistas, Jose Luis Alcántara.Asimismo la dirección local del PCA rechaza la propuesta de reglamento para regular los Centros de Internamiento de Extranjeros presentada por el Ministro de Interior, Jorge Fernández, porque insiste en el mensaje xenófobo y racista de vincular inmigración con delincuencia, al proponer segregar a los internos con antecedentes penales y no se contemplan medidas reales que impidan las vulneraciones a los derechos humanos que reiteradamente se han denunciado desde todas las instancias, como el aislamiento en un régimen peor que el penitenciario, la restricción injustificada de las comunicaciones y el insuficiente seguimiento médico, por citar algunas.
El PCA también rechaza la forma de presentar el anuncio, con unas visitas a diversos CIE’s amañadas como en los peores tiempos de la dictadura, impidiendo a los representantes parlamentarios entrar en contacto con los inmigrantes detenidos, es una clara muestra del oscurantismo con que se han gestionado hasta ahora estos centros y la nula voluntad del actual Gobierno de dar un giro real a las políticas aplicadas. Por todo ello, el Partido Comunista continuará luchando por el cierre de todos estos centros que suponen una aberración en una sociedad del siglo XXI y que vulneran día tras día todos los tratados internacionales sobre derechos humanos que España tiene suscrito.