Algeciras ha sido objeto en los últimos ocho años de un importante avance en lo referido a mejora de su situación urbanística. Para ello, el Ayuntamiento ha invertido 28,5 millones de euros en la mejora de 293 calles, lo que supone un 16% de la ciudad, ha adaptado el Plan General a la Ley de Ordenación de Andalucía, además de solucionar problemas heredados como el de la barriada de San Bernabé, entre otras actuaciones.
El alcalde, Diego Sánchez Rull, ha comparecido en rueda de prensa junto al teniente de alcalde delegado de Urbanismo, Gabriel Orihuela, para hacer balance de la gestión realizada por el Consistorio en los últimos años. En este sentido, Sánchez Rull destaca que han conseguido normalizar la situación urbanística: El urbanismo algecireño se caracterizaba por incumplir la legalidad, algo con lo que hemos conseguido acabar. Como ejemplos el primer edil se refiere a la barriada de San Bernabé, que ha sido dotada con infraestructuras y espacios públicos de los que antes carecía, la ampliación del centro de la ciudad, o la reserva de suelo para viviendas protegidas en el Cortijo de San Bernabé.
Desde la delegación de Vías y Obras se ha venido trabajando en el arreglo de vías públicas, peatonalizaciones, supresión de barreras arquitectónicas o la construcción del carril- bici, logrando así modernizar su fisonomía: Algeciras tiene una orografía complicada y cuando entramos a gobernar nos encontramos con unas calles estrechas y con infraestructuras obsoletas. Actualmente, estamos logrando calles más anchas y con nuevas aceras, pavimento y servicios, señala Sánchez Rull. El crecimiento caótico de Algeciras ha sido causante del desvío de inversiones a zonas construidas en su día de manera irregular, en vez de repercutir en la ordenación y mejora de zonas consolidadas, ha añadido Gabriel Orihuela a las palabras del alcalde.
Sánchez Rull ha tenido palabras de elogio hacia el trabajo desempeñado durante los últimos ocho años por su compañero: Gabriel Orihuela ha realizado una labor impoluta, siempre marcada por el trabajo, la constancia y la honestidad, concluye el alcalde.
Por su parte, Orihuela confiesa que decide no presentarse a las próximas elecciones municipales, entre otros motivos, porque ha sido mucho el desgaste personal sufrido en la batalla que iniciamos en la recuperación de suelo público usurpado.
Esta, precisamente, ha sido otra de las principales líneas de actuación en las política urbanística del gobierno municipal, cuestión en la que la justicia sigue dando la razón al Consistorio que está logrando devolver suelo usurpado de manera ilegal a todos los algecireños.
En el área de Patrimonio destaca la cesión de suelo público de titularidad municipal para la construcción de centros de mayores, como los de San García y Moncayo, situados en parcelas de 4.000 metros cuadrados cada uno; los 10.000 metros cedidos por el Ayuntamiento en la que alberga el nuevo Parque de Bomberos; o los colegios construidos en San García, San Bernabé, las dos nuevas guarderías del Acebuchal y San Bernabé; el centro de salud de La Bajadilla; o el nuevo parque del Centenario o la actuación en la finca del Algarrobo, entre otras. A esto se suma la cesión de suelo público para la construcción de viviendas protegidas en Huerta Siles, El Cobre o La Piñera.
Dicha delegación también ha conseguido importantes logros como la remodelación de las ruinas meriníes, la restauración del teatro Florida, de la plaza de toros de Las Palomas; los elementos ornamentales de la Plaza Alta o declaración de BIC (Bien de Interés Cultural) de las piletas romanas.
Gabriel Orihuela concluye mostrándose convencido de que el proceso que hemos iniciado en el urbanismo algecireño seguirá. De ser así, en pocos años Algeciras alcanzará la normalidad urbanística que todos deseamos.