El portavoz de Fomento de CiU en el Congreso de los Diputados, Pere Macías, interpelará este miércoles a la ministra de Fomento, Ana Pastor, para que aclare los corredores ferroviarios que el Gobierno priorizará ante la Unión Europea con el fin de que se incluyan en la Red Transeuropea de Transporte, que deberá estar en funcionamiento en 2020.
Pastor anunció la pasada semana en rueda de prensa que el Gobierno defenderá en la UE la inclusión en el proyecto de la Red Transeuropea de Transporte la construcción de una nueva conexión transfronteriza ferroviaria y viaria por el centro de los Pirineos, junto a las del Atlántico y el Mediterráneo.
Este nuevo corredor, que según la ministra “apoyan todas las comunidades autónomas”, partiría de Algeciras para discurrir por Sevilla, Castilla-La Mancha, Madrid y Zaragoza, y conectar así con Francia a través del Pirineo aragonés.
Sin embargo, los nacionalistas catalanes han manifestado su rechazo a este cambio de planes, por lo que pedirán a la ministra que “haga un esfuerzo de realismo y priorice la inversión más eficiente” que, a su juicio, es el Corredor Mediterráneo.
Para CiU, la prioridad en tiempos de crisis y dificultades de financiación debe ser “seguir invirtiendo para impulsar el crecimiento y la competitividad de los productos (nacionales) en los mercados internacionales y garantizar que todo euro de inversión se ejecute bajo criterios de máxima eficiencia y productividad”.
Así, aunque Macías reconoce que “todos los corredores transfronterizos son importantes” y deberán ejecutarse “a largo plazo”, advierte de que “a corto y medio plazo es preciso hacer un esfuerzo de realismo y reconocer que los recursos son limitados”. Por este motivo, pedirá a Pastor que “priorice aquellas inversiones que sean más eficientes en el corto plazo, las que puedan generar más empleo y aportar mayores mejoras de competitividad”.
“La mejor apuesta que puede hacer el Gobierno es decantarse por el Corredor Mediterráneo”, opina el diputado, argumentando que la vía mediterránea es el camino “más rápido, más compacto, con mayor tráfico y con mayor potencial de crecimiento e incidencia en la competitividad, así como con una clara rentabilidad económica”.
Además, este trazado cuenta con el apoyo de la Generalitat de Catalunya y de los Gobiernos del PP de la Comunidad Valenciana, Baleares y Murcia, así como la Junta de Andalucía una docena de doce alcaldes de capitales de provincia del arco mediterráneo. El corredor central, en cambio, cuenta con el respaldo, entre otros, de Castilla-La Mancha y Extremadura, ambas gobernadas también por el PP.
En su interpelación urgente, CiU argumenta además que las infraestructuras de transporte son “un instrumento básico de competitividad” y que es el momento de superar las carencias de España en esta materia, originadas por “motivos históricos” y que han supuesto “una merma en el potencial competitivo de la economía” española.
El proyecto de Redes Transeuropeas de la UE contempla los itinerarios que se consideran prioritarios y susceptibles de obtener financiación de fondos europeos, y que los distintos países miembro deben acometer con dos horizontes temporales, a 2030 y 2050. La UE prevé contar con un acuerdo sobre el catálogo de infraestructuras que integrarán estas Redes entre el verano y el otoño de 2013.
De la interpelación se derivará una moción que se votará el próximo 6 de marzo y en la que los nacionalistas podrían obligar a los grupos parlamentarios a optar entre un corredor u otro. La última vez que se votó una moción de ese tenor acabó habiendo fugas de voto incluso en el seno del Grupo Popular.
Este tema volverá a debatirse en el Congreso de los Diputados como consecuencia de una proposición no de ley (PNL) registrada por el Grupo Socialista en la que insta al Gobierno a incluir el litoral andaluz en el Corredor Ferroviario Mediterráneo, que va de Portbou a Algeciras, con el objetivo de crear una “buena conexión” a los Puertos de Interés General de Málaga y Motril.
