José Ignacio Landaluce asegura que los pagos no se llevan a cabo conforme a reglas objetivas según las necesidades o como establece la Ley con carácter general aplicándose el pago a las deudas más antiguas, sino que por el contrario rige en esta materia el amiguismo y la influencia de los distintos proveedores.
Landaluce pone como ejemplo los 96.048 euros que ha facturado el IEPALA (Instituto de Estudios para América Latina y África), por un estudio inservible sobre presupuestos participativos con cargo al año 2010, se está pagando rigurosamente desde el primer momento a razón de 4.002 euros mensuales, mientras que distintos colectivos sociales como ACASA, ADRA, el Algeciras C.F. o el Consejo de Hermandades y Cofradías, sufren continuos retrasos en el cobro de sus subvenciones.
Para Landaluce datos como este acreditan cuales son las prioridades del Alcalde Tomas Herrera, que ante su imposibilidad para poder hacer frente a una deuda con proveedores que alcanza ya los 118 millones de euros, según la Liquidación de los Presupuestos del año 2009, selecciona con criterios poco objetivos cuales son los proveedores de este Ayuntamiento que tienen prioridad como el caso de IEPALA, y cuales son por el contrario los que tardaran varios años en cobrar.
Para el Portavoz Popular, las prioridades deberían de establecerse en base a dos criterios, la antigüedad de la deuda y la importancia de la actividad realizada, y no como parece establecer un favoritismo entre los distintos proveedores que en nada beneficia a la credibilidad de este Ayuntamiento.