Tras una reunión mantenida en la tarde de ayer martes por la Federación de caseteros, Farolillo denuncia el incumplimiento de las normativas de la Feria Real por parte de algunas casetas y considera que el problema ha alcanzado una gravedad extrema este año, razón por la cual se volverá a reunir la semana que viene para tratar de nuevo el asunto y dar a conocer a la opinión pública una larga lista de situaciones que califica como insostenibles y que ponen en peligro el futuro de la Feria Real.
Muchos caseteros se siente indignados por la presencia este año en el recinto ferial de varias casetas que califican como claros ejemplos de negocio montados en suelo destinado a colectivos y peñas. En la reunión mantenida se han barajado muchos nombres de casetas pero no se ha querido dar aún a conocer de manera pública aunque sí se ha criticado que casetas como la Peña Veteranos, el Casino de Algeciras, la Peña Miguelín y Los Peces hayan pasado a convertirse en meros mesones con carteles de entrada libre, comida colocada casi en la calle y hasta personal en la calle para captar clientela. Los caseteros no entienden como puede caer en ese error la caseta de Los Peces (caseta de IU), partido que ostenta la concejalía de Feria y Fiestas.
Otro asunto tratado en la reunión ha sido el de las casetas con dobles nombres y cuyos titulares no han aparecido por la Feria Real ya que el negocio lo han hecho tras ceder el espacio por una determinada cantidad económica. En este sentido se ha puesto el claro ejemplo de la caseta Paco de Lucía, la cual este año se ha convertido en un espacio enfocado a público de diferentes tendencias sexuales. La crítica de Farolillo no ha estado dirigida a ese tipo de personal, que cuenta con su respeto, sino al doble nombre y al poco acierto de relacionar una caseta así con el algecireño más universal de todos los tiempos.
Otras casetas como el Club de Comunicaciones o Aquí hay Tomate han sido criticadas con el calificativo de “cuevas” debido a la penumbra que se vivía en el interior de las mismas, cosa que no se corresponde para nada con la tradición de la fiesta y así, casos y más casos de casetas convertidas en pubs o epicentros del botellón ante los cuales Farolillo ha decidido volver a reunirse la semana que viene y terminar de elaborar su listado de situaciones antes las que piensa exigir al Ayuntamiento que haga cumplir las normativas de la Feria Real de manera tajante.