En palabras de Pilar González la persecución de la que nuestro compañero ha sido objeto durante años por motivos políticos es el vivo ejemplo de la falta de democracia que existe en muchos consistorios andaluces. Es fundamental para el desarrollo de la democracia que la libertad de abanderar colores políticos diferentes de quienes gobiernan sea no sólo respetada, sino además alentada. Leandro Castello Puertas ha dedicado 16 años al pueblo de Algeciras demostrando un absoluto amor por su trabajo y un gran deber de servicio. La persecución sufrida por nuestro compañero obedece sólo al miedo y a la inseguridad de quienes gobiernan o pretenden gobernar un Ayuntamiento, el de Algeciras, con muy pocas garantías democráticas y con una total falta de respeto por las personas. Los andalucistas entendemos otro modo de hacer política, otras formas de servir a los ciudadanos, sin caer en el juego sucio y en la falta de sensibilidad que ha demostrado el PSOE de Algeciras. Leandro Castello es el vivo ejemplo de la honestidad política porque, a pesar de las presiones y el acoso al que ha sido sometido como trabajador municipal, ha defendido siempre la posición del Partido Andalucista. Con el despido político de Leandro Castello Puertas no sólo se deja en la calle a un funcionario municipal, también a un padre de familia y a un gran servidor de la comunidad algecireña. Exigimos, por tanto, respuestas al Gobierno de Algeciras y, dado que esta decisión sólo responde a revanchas políticas, también al partido que lo sustenta, el PSOE, al cual recordamos que las organizaciones políticas no están legitimados para manchar el nombre de las instituciones públicas ni hacer uso de las mismas con fines meramente partidistas. Nos sentimos orgullosos de Leandro Castello, andalucista ejemplar y mejor persona, quien seguirá sirviendo a los ciudadanos de Algeciras con las misma dedicación que siempre le ha caracterizado y por encima de las presiones y el desprecio de quienes actúan al margen de la democracia en política, concluye Pilar González.