Eran las 12:45 horas de ayer, 8 de abril, cuando una patrulla del Grupo de Tráfico de la Policía Local que se encontraba colaborando con un servicio del 061, que atendía a un toxicómano agresivo con síndrome de abstinencia en la Barriada de la Piñera. Recién terminada esta colaboración y cuando se disponían a marcharse del lugar, los agentes fueron requeridos por H.R.B., el cual manifestaba que en su domicilio, que se encontraba a unos 500 metros del lugar, su hija de 13 meses de edad estaba convulsionando e inconsciente.Inmediatamente la patrulla se dirigió al lugar y requirió la asistencia sanitaria del 061 pudiendo observar que la menor no había recibido ningún golpe ni se constataba que existiera un motivo aparente que justificara su estado. Los agentes tomaron la iniciativa, y hasta la llegada del servicio de urgencias médicas, le realizaron a la menor un masaje cardiaco y las maniobras RCP, provocando que la niña rompiera a llorar poco antes de que llegaran los servicios del 061. Los sanitarios consiguieron estabilizarla y la menor dejó de convulsionar, siendo trasladada al Hospital “Punta de Europa” para su tratamiento y estudio.La responsable de Protección Ciudadana del Consistorio, Cristina Garrido, felicita públicamente a los policías que salvaron la vida de la pequeña, “en una intervención que pone de manifiesto la buena formación y preparación de nuestros agentes, que se extiende a otros ámbitos, como en este caso los primeros auxilios”. Garrido también destaca la rapidez de respuesta de los servicios, “algo que estamos consiguiendo gracias al incremento de la presencia policial en las calles y a una mejor distribución de las patrullas mediante la división de la ciudad en distritos policiales”.
