Las investigaciones apuntan a que el cuartel era uno de los objetivos de ETA, tras encontrarse fotos de las instalaciones entre el material intervenido, lo que confirma el dato que el pasado fin de semana señaló el Ministerio del Interior de que la banda había puesto a la provincia de Cádiz en su diana. Entre la documentación hallada en la casa también se encontraban mapas de Cádiz y San Fernando, anotaciones de los horarios de autobuses de la capital de la provincia, y un teléfono móvil con la inscripción “Cádiz”.
Al elegir Zahara de los Atunes, la banda buscaría un gran efecto mediático puesto que en ese municipio tienen residencias de descanso numerosos políticos y actores. El último atentado mortal de ETA sucedió el verano pasado en Baleares, donde los terroristas asesinaron a dos agentes con un coche bomba.
Una docena de agentes
El cuartel está ubicado en la playa de Atlanterra y pertenece al término municipal de Barbate. A él, según el Ayuntamiento, están adscritos “unos diez o 12 agentes” que no viven en estas dependencias, donde estaba previsto hacerse una reforma. “Nos ha sorprendido mucho la noticia”, ha apuntado el alcalde de Barbate, Rafael Quirós. La Asociación Unificada de Guardias Civiles ha pedido hoy que se cierren las instalaciones porque no reúnen las condiciones de seguridad.
Las fuerzas de seguridad de Portugal han intensificado en las últimas horas la vigilancia en la frontera con España para localizar a los dos terroristas que habitaban la vivienda de Óbidos y que huyeron de una furgoneta que dejaron abandonada en un control policial.
Los expertos en la lucha antiterrorista se centran ahora en averiguar la presencia real de ETA en Portugal, que puede llegar más lejos del arsenal encontrado en Óbidos. La banda terrorista llevaría al menos dos años instalada y podría tener más escondites de armas diseminados en este país, según informa la cadena SER.