1- las utilizaremos para evitar condensaciones.2- Las utilizaremos para combatir humedades.3- Las utilizaremos para intentar crear un ambiente agradable en las estancias de nuestra vivienda y mirar por nuestro bolsillo. Para estar a gusto es suficiente mantener una temperatura de 21 ºC en invierno. Con temperaturas más altas, aumenta el consumo de energía pero no el confort.
¿Cómo empezar? Pues muy sencillo.Lo primero que tenemos que hacer es detectar las posibles filtraciones de aire en cada estancia de la vivienda. Para ello nos construiremos lo que yo denomino un detector de corrientes de aire, solo necesitas un bolígrafo, un trocito de plástico para congelar y papel celo.Sujeta con papel celo el trocito de plástico en el borde del bolígrafo, de modo que parezca una bandera.Escogeremos un día de mucho viento, cerraremos todas las puertas y ventanas de la casa (dejar persianas levantadas), posteriormente pasaremos nuestro detector de corriente alrededor de las puertas y ventanas y cuando el plástico oscile entonces habremos encontrado un punto por donde se cuela el aire, yo aconsejo ir marcando con un lápiz los puntos localizados.
El siguiente paso es intentar controlar el paso de aire a nuestra voluntad, es decir, nosotros formaremos corrientes de aire cuando abramos puertas o ventanas pero, mientras estas permanezcan cerradas deberemos intentar que estas sean lo mas estancas posible.Aunque no lo parezca, el aire que se cuela por debajo de la puerta principal puede resultar muy molesto y desequilibrar la temperatura de nuestro hogar. Por ello, lo mejor es instalar burletes, yo aconsejo burletes con doble posición: cierre y apertura, de este modo controlaremos nosotros la entrada de aire. Para el perímetro utilizaremos juntas de goma.
Para las ventanas utilizaremos siliconas al exterior y pastas, masillas, yesos en el interior en los encuentros de la carpintería con el cerramiento.Para la estanqueidad de las hojas de ventanas utilizaremos burletes y juntas de goma.
Como ultimo paso os invito a que experimentéis como se forman estas corrientes con el mero hecho de abrir o cerrar un burlete, una ventana o una puerta, y no olvidéis que el volumen de aire que entra debe salir por algún sitio y que a veces el mero hecho de abrir una ventana no conlleva a que se forme una corriente de aire.
Victor Torres