Ávila mantuvo este martes un encuentro con los representantes del sector de empresarios de playas, acompañado del consejero de Turismo, Luciano Alonso, y al concluir el encuentro se mostró muy satisfecho. Según el consejero, la transferencia de las competencias sobre el litoral al Ejecutivo andaluz está cada vez más cerca, y podría traer consigo una solución al problema de los chiringuitos.
La mesa técnica encargada de elaborar el decreto de transferencias se volverá a reunir por tercera vez durante este mes de enero, según Ávila, y el deseo de la Junta “es que seamos capaces de llegar a un acuerdo durante el primer trimestre”.
La transferencia de competencias no sólo afectará a los chiringuitos, pues incluirá materias como la ordenación del territorio o el medio ambiente. El proceso de transferencia servirá para que la Junta, una administración más cercana a la problemática de los chiringuiteros, sea quien aplique la Ley de Costas. “La Junta, por definición, tiene mayor cercanía al territorio, y eso le permite tener una visión diferente, debido a su proximidad con la realidad de los empresarios”, manifestó el consejero.
El presidente de los empresarios de playas, Norberto del Castillo, aseguró por su parte que los propietarios de los chiringuitos no se encuentran “incómodos dentro de esta ley”, pero que su deseo es “que se desarrollen todos sus artículos”, en lo que confían que influya la aplicación de la norma que lleve a cabo la Junta de Andalucía.
“Hasta ahora el sector había ido por un sitio y la Administración por otro, y eso ha dejado a las playas paralizadas. Hemos iniciado una nueva etapa”, aseveró por su parte el presidente de los empresarios de playas, Norberto del Castillo.